¿Pueden escuchar ese silencio?

“La visión gubernamental de la economía puede resumirse en unas cortas frases: si se mueve, póngasele un impuesto. Si se sigue moviendo, regúlese, y si no se mueve más, otórguesele un subsidio”. Ronald Reagan

A partir de las 12 de la noche se acaban las campañas, cómo antes se habían acabado las intercampañas y antes de estas las precampañas. ¿Alguno notó la diferencia?

Tenemos una Democracia muy compleja. En el origen no lo era tanto, pero en el afán de tratar de hacerla “justa” le hemos añadido tal cantidad de candados, condicionantes, reglamentos, supuestos, etc., que se ha vuelto algo monstruosamente difícil de administrar y como lo he comentado, muy cara.

Permitan recordarles que los Estados Unidos Mexicanos (México para todo el mundo, menos para los mexicanos) es una Federación, es decir, “una organización política en el cual diversas entidades o grupos humanos dotados de personalidad jurídica y económica propia (Estados) se asocian, sin perder su autonomía en lo que les es peculiar, para formar un solo Estado (denominado Federal) con el propósito de realizar en común los fines característicos de esta institución.”

Vale la pena recordar también que desde la conclusión de la Revolución Mexicana, las elecciones eran organizadas por el Estado Mexicano a través de la Secretaria de Gobernación. Esto dejó de ser viable a partir de la “caída del sistema” en 1988. Como resultado y a través de la presión política y social, el 11 de octubre de 1990 inicia operaciones el Instituto Federal Electoral todavía como un organismo dependiente del Estado. El Instituto Federal Electoral se “ciudadaniza” y se vuelve independiente a partir del 31 de octubre de 1996.   

A partir del 4 de abril de 2014 el IFE se transforma en el INE, Instituto Nacional Electoral, es decir, una entidad cuyo objetivo inicial era organizar elecciones federales y que no tenía responsabilidad alguna en las elecciones estatales, se transforma en una entidad nacional compleja y cara.

¿Por qué si México es una Federación no tenemos una autoridad electoral que respete esa configuración póltica?

Necesitamos recuperar nuestra Democracia o, cómo lo escribía ayer, adueñarnos de ella por primera vez y hacernos responsables.

Por lo pronto les invito a disfrutar del silencio “postcamapañas”…